Solamente te comiste una galletita y al pesarte días después te topas que has aumentado de peso. No, no está descompuesta tu balanza, existen ciertos motivos por los cuales pudieras estar aumentando de peso y los estas dejando pasar desapercibidos. Esto se puede dar incluso aunque no cambies tus hábitos alimenticios. Hay un detallito muy pequeño que a pesar de comer sanamente, pudiera ser la razón por la que estas subiendo de peso. Aquí te presentaremos 5 razones por las que pudieras estar subiendo de peso. Échales un vistazo y analiza que es lo que está pasando.
Tu actividad física no es igual que antes
Aquí tenemos el primer factor y el cual pudiera empezar a desencadenar el aumento de peso de una persona. ¿Recuerdas cuando ibas en la universidad? Tenías tiempo para jugar un partido de fútbol con tus amigos o correr en el parque con tus amigas al terminar clases. Ahora tienes un empleo en el cual pasas la mayor parte del día y al volver a casa te das cuenta que debes descansar para que mañana hagas lo mismo. Esto no te deja el mismo tiempo para hacer actividades físicas. Una buena solución pudiera ser que en lugar de usar tu coche para ir al trabajo, te fueras caminando o en bici. Así cubrirás tu rutina de ejercicio del día y llegarás a tu trabajo a tiempo y sin problemas.
Comes en otro lugar
Aun así estés comiendo la misma comida saludable que acostumbras comer, en un lugar diferente, pudieran no estar preparando ese platillo con los mismos ingredientes y procedimientos que tú utilizas en tu cocina. Cosas como la cantidad de sal, la calidad de los ingredientes o la marca del aceite con la que cocinan pudieran estar haciéndote subir de peso.
No dejes de comer saludable y de controlar la preparación de tu comida. Cocina desde casa y llévate tu propia comida a tu trabajo. Esto es una buena idea para no tener que comer fuera de casa.
Incluiste un nuevo alimento
Estabas llevando tu alimentación de forma correcta, pero un día empezaste a engordar. Analiza bien lo que estas comiendo. Pudieras estar alimentándote con algo nuevo que estas incluyendo en tu dieta. ¿Tal vez esas barras de granola que viste en el supermercado? ¿O esa bebida azucarada “baja en calorías” que viste en la televisión? Este tipo de alimentos pudieran ser la diminuta razón que está haciéndote subir de peso.
Horarios de alimentación
Esta es bien común que pase. Por alguna razón en tu trabajo te cambiaron de horario y ahora estas en el turno vespertino. Esto te hace cambiar tus horas de comida. Tu organismo también tiene una rutina que adopta dependiendo de tu estilo de vida. Ten cuidado con estos cambios de horario en la alimentación.
Cambios en tu dieta
A esto nos referimos por ejemplo; por cuestiones de tiempo, ya no estas desayunando o tu desayuno no es tan completo que digamos. Saltar una comida no quiere decir que no subirás de peso por dejar de comer, todo lo contrario. Tener todas las comidas del día serán pieza clave para no subir de peso. También dejar de tomar agua puede ser un factor que te pudiera estar haciendo subir de tallas. Considera alimentarte bien durante tu jornada y no olvides tomar 2 litros de agua.
Como puedes ver, son detallitos muy pequeños que posiblemente no habías considerado. Pero son cruciales para tu peso corporal. Analiza tu día a día y trata de identificar si alguno de estos factores son los que están haciéndote subir de peso. Recuerda que una vez que dejas de hacer ejercicio es cuando empiezan este tipo de problemas.
